Anastasia Skorychenko, madre de tres hijos, le dio 22 estocada al bebecito, solo unos momentos después de dar a luz en su balcón, usó las tijeras para cortar el cordón umbilical.
Ella mantuvo en secreto su embarazo y comenzó a tener contracciones por la noche cuando sus dos hijas, de 7 y 4 años, y su abuela dormían.
Sin querer despertarlos, la madre fue al balcón donde se agachó sobre un recipiente de plástico y dio a luz a un niño sano.
Después de eso, presionó su mano izquierda contra el rostro del recién nacido para evitar que llorara y luego cometió el hecho con las tijeras, según los registros judiciales.
Cuando el bebe ya no se movía, lo metió en una funda plástica, la sacó afuera y la arrojó a un tanque de basura cerca de la cuadra de apartamentos, dijeron los investigadores.
A la mañana siguiente, el cuerpo del recién nacido fue visto por una residente local que llamó a una ambulancia y a la policía.
La madre de 30 años confesó el hecho durante la audiencia de sentencia diciendo que ‘el bebé no era deseado’, ya que el tercer hijo empeoraría la situación financiera de su familia, se dijo en el Tribunal.
Fue arrestada varias horas después de que se encontró el cuerpo del infante. No había sufrido ningún trastorno mental o depresión posparto y planeó todo de antemano.
El 5 de enero, Anastasia Skorychenko fue acusada de asesinato premeditado de su hijo y le cantaron dos años tras las rejas.
Los jueces tomaron en cuenta el hecho de que la madre admitió su culpabilidad y suavizaron su decisión, dicen medios locales.
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