Steve Nelson Moreno, de 37 años, quien estaba hospedado en el hotel Meliá Caribe Beach de ese poblado turístico, estaba al borde de la piscina y resbaló.
El legista actuante explicó que murió como consecuencia de ahogamiento por sumersión.
Su esposa, también norteamericana de origen colombiana, dijo a la Policía que el hoy occiso le había enviado un mensaje momentos antes diciéndole que la amaba.
También expresó que este poseía una discapacidad desde los 17 años.
En tanto, tres de los empleados del hotel, manifestaron que encontraron al hoy occiso en el interior de la piscina, sentado en una silla de ruedas.
La policía investiga si Moreno cayó a la piscina accidentalmente.
El cadáver del extranjero fue levantado en el lugar y enviado a Patología Forense del Hospital Antonio Musa en San Pedro de Macorís, donde se le practicó una autopsia y luego le fue entregado a sus familiares.
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