Ana Lucelida Nagles trató de agarrarse a su casa localizada en el centro poblado Ospina Pérez, sin embargo ante la mirada de los vecinos enojados por lo sucedido no se pudo hacer nada ante la orden emitida por el juzgado de Palermo.
La mujer no aguantó el dolor que le ocasionó lo sucedido y tuvo que ser atendida por los médicos. Andrés Vargas Gutiérrez, personero de Palermo, dijo que están haciendo todo los posible para conseguirle una casa digna a Ana Lucelida Nagles.
La Policía Metropolitana de Neiva afirmó que el nuevo dueño de la casa le dio unos cuantos metros cuadrados para que la señora pudiera tener espacio en donde por lo menos pueda hacer una habitación.
Lucelida Nagles pasó esa noche en la parroquia de su comunidad, en Huila.
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